Descubren varias irregularidades; dejan tirada asamblea
Ex trabajadores de la extinta fábrica de Yute acordaron, en asamblea, cesar a quienes se venían de-sempeñando como sus dirigentes: Juan Ruiz, Buenaventura Jurado y al asesor de éste último, Saúl Rodríguez Martínez, tras haber detectado una serie de irregularidades en el manejo y explotación de su patrimonio, consistente en varios terrenos.
El domingo pasado, estaba pactada una asamblea para tratar los temas de los ex trabajadores, entre ellos, el informe de la Comisión Fiscalizadora que se formó el mes pasado para indagar las anomalías detectadas, entre ellas, una “operación” de compra-venta de un predio que ellos denominan el Carmen Grande.
A pesar de que se había pactado la reunión, el abogado Saúl Rodríguez y Buenaventura Jurado, el primero, acusado de haberse apropiado de al menos 16 predios más, no acudieron a la asamblea. El que si atendió el llamado, fue Juan Ruiz quien escuchó una a una las acusaciones y admitió que se hicieron operaciones sin consultar a la asamblea.
La “Comisión Fiscalizadora”, conformada por Felipe Jiménez Reyes, Rodolfo Mejía Ortega, Bernardo Torrijos Lozano y Felipe Márquez, ya realizó algunas investigaciones y detectó varias anomalías que tienen implicaciones judiciales; en la asamblea del domingo, se estableció que los dirigentes y el abogado, que en ocasiones la hacía de “apoderado legal”, realizaron transacciones y adjudicaron predios sin tener el poder legal para hacerlo, por lo que habrían incurrido en varios delitos.
Algunos de los ex trabajadores, se dijeron indignados por la forma en que los líderes manejaron su patrimonio, por lo que decidieron, de manera inmediata, proponer su deposición; no obstante, dejaron claro que continuarán con las investigaciones y harán las denuncias correspondientes para deslindar responsabilidades.
Y es que, según se dijo en la asamblea, desde hace varios años, quedó sin efecto su representatividad ante la muerte de quien les había otorgado un poder, luego entonces, todos sus actos no pueden ser reconocidos; además, los líderes y el abogado, promovieron un poder notarial a “espaldas” de los ex trabajadores, ya que nunca se informó a la asamblea.
Los ex trabajadores convocaron a una nueva asamblea, pero ahora, para realizarse dentro de 15 días; en tanto, le autorizaron a la Comisión Fiscalizadora, tener el poder para seguir con las investigaciones ante las autoridades involucradas en el registro de sus propiedades.